Los días me
atraviesan sin pausa, me van empujando al vacío que se dibuja en el tránsito de
mis caminatas.
También
logran que me pierda en el tiempo de otros tiempos.
Como si en
algún lugar existiese una vida que ya viví, o la agitación que producen estos
latidos fuesen los pulsos de un muerto que todavía respira…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario